Significado:

"Ahora mismo, el ser humano, debe hacer un gran esfuerzo en comprender y aceptar los fundamentos por el cual, la energía sigue su propio proceso; el proceso del pensamiento. Pues como ya hemos visto, parece ser, que no solamente la Tierra es una escuela en donde nosotros vivimos, sino que, además, es la galaxia el lugar por el cual, los seres que procesan dimensiones perfectas, aprenden y se desarrollan, investigan, viven, aman, mueren y se transforman, intentando adaptar su forma física a mayores y mejores formas por donde la luz, se pueda manifestar cada vez con menores inconvenientes".


Hulupa D´hära VI. Adhams y la doncella.

Los libros Hulupa D´hära, son el producto de la canalización telepática a través de las Huestes del Plano de la Luz, en colaboración con la Fraternidad o Confederación Cósmica y Universal. Su difusión debe ser gratuita, ya que, nos pertenece a todos por derecho de nacimiento.

Estas seis historias, nos corresponden como legado mismo, habiéndose perdido su singladura a través de los tiempos. Para entender el conocimiento que nuestros Hermanos del espacio nos quieren transmitir, deben ser leídas ordenadamente.

Así mismo, quedan reservados los derechos al autor de la obra.

martes, 28 de febrero de 2012

Aprendiendo del Mago Interior. II

   Al hilo del artículo anterior, queda todavía, muchas cosas por comunicar porque el tema es bastante extenso, y es por ello, que se ha tenido que dividirlo en dos artículos. En el párrafo anterior vimos cómo nos dejamos llevar por la acción creadora de los pensamientos, y de cómo somos capaces de hacer caso a aquello que se maneja en el proceso de la creatividad, porque ello nos hace sentirnos bien, ya que, nuestro cuerpo astral, es alterado como un amplificador de ondas, de modo que, siendo éste su verdadero mecanismo, a eso le llamamos ego. Entonces, decimos que tenemos mucho ego cuando vemos que queremos destacar o despectivamente, decimos a una persona que tiene mucho ego etc. Por otro lado, dimos por hecho que el estímulo que se manifiesta por medio de los sentidos, es un mecanismo necesario que acompaña al proceso de crear. También he de decir, que hay otro engaño respecto a que nosotros, realmente, creamos, pues no creamos nada, sino que se trata de dejarse llevar por la corriente energética al enfoque de perfilar una idea determinada. Por vibración y dependiendo del nivel de conciencia desde donde nos enfoquemos, nos llegará una idea determinada que se corresponderá a lo que nosotros buscamos. Y esto, es un proceso natural que nos llega por derecho de nacimiento y que por legítimo merecimiento, se corresponderá a nuestra propia vibración por vínculo de correspondencia afín.
   Es fácil hallar que una misma idea, llegue a varias personas al mismo tiempo, como por ejemplo, la tabla periódica de elementos que surgió en 1881 por varias personas en distinto lugar del planeta. La idea se quedó con la primera persona que la patentó, como suele ocurrir. Seguramente, si se estudiasen a esas mismas personas a las que le llegaron esa misma idea, veríamos que también se asemejarían por vibración afín. Luego, somos nosotros los que coloreamos, modificamos y le damos vida en el proceso de la construcción del pensamiento necesario para desenvolverse o simplemente, llevar algo a la acción. Es decir, le damos forma, en virtud a las vicisitudes de personalidad que cada uno tenga. Y aquí, vuelve a venir el patrón del engaño, cuando hacemos nuestra, dichas ideas. Este es un proceso que, como ya hemos visto, se inicia desde la energía que sin la dimensión sutil o cuarta dimensión; sería imposible. Nuestras -en todo caso-, serían las conexiones neuronales necesarias para hacer mecánica una idea que muy bien, partiendo de la experiencia de cada ser humano, confeccionando una rutina o técnica, mejorando el método sistemático obtenido, etc. Aún así, tampoco sería nuestro, pues hasta cuando decimos nuestro cuerpo, es un soporte prestado, dado, por la manifestación física al objeto de la energía misma.
  
   Cuanto más nos cuidemos, más conocimiento tengamos, más meditación practiquemos y más saludables sean nuestros hábitos: mejor podremos entendernos a nosotros mismos y mejores serán nuestras acciones creadoras de nuestros pensamientos. Más saludables y con mayor calidad vibratoria, más sutil será su color y con más brillo contará. Todo esto, se irá entendiendo mejor a medida que vayamos despertando a la luz y veamos, en consecuencia, mejor la energía que se halla detrás de lo que esconde la tercera dimensión.

   ¿Hay alguna forma de saber si hemos conectado con nuestra ciudad interna?. 
   Dijimos que la ciudad interna sería como el alma. ¿Cómo llegar al alma?. El alma, estaría compuesta de materia muy sutil procedente de la quinta dimensión y que en nosotros, interacciona en forma de cualidad o cualidades a través de la intuición, acorazonada o percepción magnética, que nos impulsa a la realización de una acción que, por lo general, suele estar encaminada a la realización de una acción que nosotros entendemos como buena, ya sea creativa o advirtiendo de una situación de peligro, etc.

   ¿Hay algún camino que nos lleve hacia la percepción de la ciudad interna?.
   El Mago es aquél, que conociendo el proceso, utiliza su sabiduría para hacer que los propósitos vayan dirigidos en el mismo sentido que lo estimulado por la corriente cósmica que a su vez, proviene de los mundos divinos o planos superiores. Normalmente ya contamos con un Mago Interior. Maestro, Guía, etc. 
   Ahora, en este momento de la historia, el ser humano necesita un empuje en su vida que le haga entender quienes somos, de dónde venimos y adónde vamos. Ahora, tenemos la oportunidad de aprender los mecanismos sutiles para el manejo consciente de la energía. Pero todavía no hemos llegado a ser Magos. Para ser Magos, deberíamos manejar directamente la energía al propósito de nuestra participación única y divina en la solución que sea precisa a los problemas que estén a nuestro alcance. Y desde luego, ya no valdría la postura de dejar a otras personas hacer el trabajo sucio, porque si no cambiamos las condiciones de vida, éstas nos llevarán a que al final, tengamos que ser partícipes obligados por las circunstancias. Y siempre es mejor hacer las cosas por voluntad propia, que las circunstancias nos empujen a actuar de una forma determinada. Tampoco nos sintamos culpables de nuestras limitaciones. Ahora tenemos un mecanismo infalible e infinito que nos brinda la oportunidad de crecer al despertar de la conciencia que día a día, se produce con un mayor rigor y predisposición. Para nuestra suerte, nuestros Hermanos Mayores de la Luz estimulan a quien trabaje internamente, con amor y con conocimiento. Ellos no nos decepcionarán.



No hay comentarios:

Publicar un comentario