Podemos estar seguros de que nada escapa a la Ley Divina. Estemos preparados para abrazar al amor de una forma nueva, sustancial y necesaria en nuestras vidas. Seamos auténticos guerreros y conozcámonos. Conociendo lo que nos limita, nos hace ver la realidad de una forma nueva, consciente y despierta. Quien quiere ahora, lo tiene muy fácil. La conexión con lo fundamental de la vida se halla en la intimidad de nuestras experiencias con la otra realidad, aquella, que creemos está más allá. Pero que, realmente, hoy está más accesible que nunca, pues hoy, nos podemos observar con total precisión de causalidad.
La conexión con lo fundamental de la vida, se halla en la química cuántica de nuestras conexiones internas a nivel sub-atómico. Todo revierte del Ser, pues cuando encuentras la llave de tu ciudad interna, lo único que te importa es que tu luz, ilumine el camino de otros peregrinos para que la oscuridad, no les confunda de camino.
Y eso es lo natural. Lo ilógico, es creer en realidades impropias para el ser de hoy. Irrealidades que escapan a nuestra comprensión. La imaginación, debe servir a un propósito. La fantasía, debe cumplir su cometido con el ser. No para confundirlo, ni condicionarlo, sino para ayudarlo a esclarecer sus ideas. Para que, su vínculo con el cosmos se restablezca. Pero antes, se debe encontrar la llave del Amor que abrirá su ciudad interna. Y esta llave se puede encontrar si se leen las seis historias que componen Hulupa D´hära.
¿Cómo puedo hacer para que esto se conozca?. ¿Debo poneros un cartel de neón encima de vuestras narices para que, siendo luminoso os dejéis influir por la novedad?. ¿Debo esperar 10 años más para recibir un poco de amor-comprensión de vosotros, mis hermanos y hermanas?. Evidentemente, no. Esto demuestra lo equivocados que estamos y la poca cordialidad que todavía reina en las mentes de las personas. La falta de cordialidad, engreimiento y soberbia, son todavía nuestros peores enemigos.
Hace tiempo, hubo una película en blanco y negro, en donde de un ovni, bajaba una especie de robot con un regalo en las manos como muestra de bien venida. En la película, el ejército dispuesto en formación, acabó rápidamente con el robot y prácticamente con la nave. Desde esa película, habrán transcurrido más de 50 años y la humanidad, hoy por hoy, vuelve a actuar de la misma manera.
¿Cuánto tiempo debe transcurrir para que apreciéis el amor-sabiduría que se os da?. ¿Qué más debe suceder?.
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