Para quien no lo sepa, los cuentos del sistema local Hulupa D´hära narran las proezas que se gestaron hace mil millones de años en este sector de la galaxia, cuando el planeta Tierra estaba en formación creando un precedente, configurando su pauta energética o estadios de aprendizaje, también conocido como carta natal o aspecto del carácter en la personalidad. Todo es energía. La Tierra tiene su propia vida interna física-magnética y unas características de flujo y reflujo energético que permite sustentar la vida en su total magnitud a parte de predisponer los medios energéticos en donde los seres humanos evolucionamos intrínsicamente. Como microcosmos que somos estamos solos ante esa bastedad a la cual llamamos cosmos y de lo insignificante que llegamos a ser frente a su perfecto funcionamiento. Las constelaciones, son formaciones de energía viva, radiante y magníficamente estructuradas. Nada es al azar. De hecho, la bóveda celestial de nuestro pequeño universo comienza con la estrella polar formando la cúspide Osa Menor que señala al norte y bajo la formación del cucharón tenemos el resto de constelaciones alrededor de nuestro sistema solar. Ése es nuestro sistema local. La Osa Menor está formada por siete estrellas en representación a los primeros signos del zodiaco en donde se inició la andadura de la raza dominante en este sector de la galaxia. Algo de importancia deberá tener cuando hasta nuestro creador predispone qué forma deben tener las constelaciones que nos permite recuperar nuestra historia por mucho que nuestra andadura se tuerza y se malogre nuestro objetivo. Por ello, que si sientes el anhelo a indagar a buscar nuestros arraigos y si tienes inquietudes en conocer; no las abandones. No estoy diciendo que tenga la verdad absoluta. sólo digo que investiguéis que no cejéis en el empeño de conoceros.
En Proyecto Uni narro los comienzos que tuve a partir del año 1998 cuando experimenté el primer encuentro con un artefacto que no era de este mundo. Era la prueba evidencial de las canalizaciones de mensajes que obtuve en esos tiempos. Siempre guardé el anhelo a seguir trabajando. Entendí todo esto como servicio a la humanidad. Entonces me dieron los títulos de las seis historias Hulupa D´hära. Tras apuntarlas se me instó que esto sería el preludio de un trabajo futuro que si yo quisiera podría hacer. Fue una gran satisfacción para mí el sentirme útil en la envergadura de esta empresa. Así lo vi en ese momento. Lo guardé todo y continué con mi vida. Y fue diez años después en el 2008 que tras una serie de experiencias se me presentaron en la cuarta dimensión y me comunicaron que ya estaba preparado para continuar con mi trabajo. Y así es como nacieron estas seis historias físicamente, pues astralmente siempre han estado en nuestro interior. Pero se necesita de un estimulo externo para que surja y este estímulo es la Luz, en forma de conocimiento. Los portales igual que se abren se cierran. La información una vez canalizada no vuelve a repetirse con el mismo patrón. Y si se repite no se sabe cuánto tiempo ha de transcurrir. Pero si juntas la información que han canalizado los contactados repartidos por lo ancho y largo del planeta sí que existe una concordancia. Consecuentemente hay una lógica trascendental en todo ello. Y eso es lo bonito lo bueno y lo deseable de haber vivido en estos tiempos.
Todo está escrito en las estrellas. En Proyecto Uni se menciona la importancia que tiene la estrella Sirio como sede en los acontecimientos y decisiones que la fraternidad y el Concilio de los doce Ancianos ofrecen a los aspirantes, discípulos e iniciados de este mundo para el bien del conjunto, de la humanidad y del propio sistema solar. La finalidad es alcanzar la influencia del alma. Can Mayor es la compañera de Sirio que consta de tres estrellas importantes: "el anunciador". "la resplandeciente" y "la gloriosa". Lo que los antiguos ya lo representaban como el Yo Superior. En el Can Menor tenemos una estrella más brillante y se le denomina el redentor o "portador de la carga" o el que lleva la carga por los demás. Asociadas a estas constelaciones tenemos a la constelación Lepus que según los escritos arcanos significa liebre y contiene una estrella carmesí muy brillante que representa al aspirante en su búsqueda no reconocida a la influencia del alma, al contacto con el Yo Superior a través del Yo Inferior. En el zodiaco Dendarah el nombre dado a esta estrella roja es Bashtibeki que significa "caída maldita". Así es cómo la sabiduría arcana daba a conocer este hecho como representación al aspirante que se siente eternamente perseguido por el "enemigo caído" o "el enemigo de Aquel que viene". Las otras estrellas de Lepus recibían nombres como: "el loco", "el amarrado" y "el engañador". Atributos todos ellos de las fuerzas del mundo tenebroso cuya finalidad es retrasar la evolución e incluso la extinción misma. Para vencer al enemigo debes conocerlo.
Después de la época arcana en Egipto, este conocimiento impartido por Thot se perdió debido al engaño perpetuado hasta los días de hoy, por parte de aquellos que se hacen pasar por maestros en la búsqueda de la realización espiritual y sus diferentes ramificaciones y escuelas que imparten curación, sanación y prometen una rápida ascensión espiritual. Ahí comprobamos cómo las fuerzas de la materialidad han efectuado un laborioso trabajo de influenciar negativamente tergiversando la realidad a su antojo. El camino es lento, costoso pero firme y seguro. No hay nada que parezca imposible cuando ya estás en el sendero. Se requiere sacrificio, constancia y servicio que gracias al amor no se hace algo superfluo o insustancial, sino que existe un progreso. Si te lo pintan como un camino de rosas deberías desconfiar.
Los griegos intentaron recuperar parte de la información y así lo hicieron aprovechando la apertura del portal cósmico en aquella época, canalizando la representación de la constelación de Hércules como el discípulo que viene a trabajar o a realizar un trabajo. Los dioses lo dotaron de un pectoral dorado, un arco y flechas y una espada. Con todo ello y en la época en la que estaban, se asocia los doce trabajos de Hércules, hijo de Zeus con las doce constelaciones del zodiaco. Con unas enseñanzas y analogías muy interesantes en relación al tema que estamos tratando.
Los trabajos que realizó en el orden correcto cronológico a las agujas del reloj en el zodiaco sería:
-Aries: La captura de las Yeguas devoradoras de Hombres.
-Tauro: La captura del Toro de Creta.
-Géminis: Recogiendo las Manzanas de Oro de las Hespérides.
-Cáncer: La captura de la Gama o Cierva.
-Leo: Matando al León de Nemea.
-Virgo: Apoderándose del cinturón de Hipólita.
-Libra: La captura del Jabalí de Erimanto.
-Escorpio: Destruyendo la Hidra de Lerma.
-Sagitario: Matando las Aves de Estinfale.
-Capricornio: Matando al Cerbero, guardián del Hades.
-Acuario: Limpiando los Establos de Augias.
-Piscis: Captura de la Manada Colorada de Gerión.
En la foto se nos representa a Hécules sujetando las columnas del portal cósmico o también conocido como portal de la iniciación.
