Significado:

"Ahora mismo, el ser humano, debe hacer un gran esfuerzo en comprender y aceptar los fundamentos por el cual, la energía sigue su propio proceso; el proceso del pensamiento. Pues como ya hemos visto, parece ser, que no solamente la Tierra es una escuela en donde nosotros vivimos, sino que, además, es la galaxia el lugar por el cual, los seres que procesan dimensiones perfectas, aprenden y se desarrollan, investigan, viven, aman, mueren y se transforman, intentando adaptar su forma física a mayores y mejores formas por donde la luz, se pueda manifestar cada vez con menores inconvenientes".


Hulupa D´hära VI. Adhams y la doncella.

Los libros Hulupa D´hära, son el producto de la canalización telepática a través de las Huestes del Plano de la Luz, en colaboración con la Fraternidad o Confederación Cósmica y Universal. Su difusión debe ser gratuita, ya que, nos pertenece a todos por derecho de nacimiento.

Estas seis historias, nos corresponden como legado mismo, habiéndose perdido su singladura a través de los tiempos. Para entender el conocimiento que nuestros Hermanos del espacio nos quieren transmitir, deben ser leídas ordenadamente.

Así mismo, quedan reservados los derechos al autor de la obra.

miércoles, 16 de diciembre de 2020

¿Existe un código musical escondido en la última cena de Leonardo Da Vinci?.

 

     Así es. Justo el año pasado oí hablar de ello. Y de cómo Leonardo Da Vinci utilizó el fresco, allá por el 1495 para imprimir un código musical que, al ser tocado en un momento determinado de la historia, podría hacer cambiar el rumbo de los acontecimientos del planeta. ¿Estoy bromeando?. ¡Juzguen por ustedes mismos!. Fíjense en el tamaño de la obra: 880 cm x 460 cm. El 8 es un número que no solamente nos vincula con lo infinito puesto al revés, es que, además, representa al Cristo y a las energías crísticas. El siete representa a la humanidad. En estos nuevos y convulsos tiempos. El Cristo y los Maestros de la Sabiduría Eterna han regresado a la Tierra. 

     





     Este código fue descubierto gracias a la investigación que hizo Giovanni María Pala, e intenté interpretarlo con mi violín. Dado que el violín surgió un siglo más tarde, en esa época ya existía el laúd, la mandolina, todo tipo de flautas y tambores, órganos y clavicordios. El violín tiene el mismo funcionamiento que una mandolina. De hecho, hace unos diez años yo ya tocaba mandolina y música medieval.  Con el violín llevo los tres últimos años y entiendo su funcionamiento porque es igual que una mandolina. El problema radica en el arco que es complicado hasta que uno se acostumbra a su manejo.

     He tomado la misma interpretación de la investigación que realizó Pala. Es decir, he tomado los panes como bajos y las manos como notas y lo he escrito sobre el pentagrama. También lo he interpretado al revés, es decir, como lo haría Leonardo que escribía en código, interponiendo un espejo. En este caso es leer de derecha a izquierda y así es como Pala encontró una cadencia musical. 

   A parte, he incluido el bajo en sol para los panes redondos y amarillos y la para los panes pequeños y anaranjados. Y el hombro izquierdo de Jesús, como si fuera una mano más y es la que le da sentido a la obra. Ya que, tiene un tono marrón claro a causa del cabello y no es azul como debería, dado al color de su túnica. También, he usado el armazón en Fa#, ya que, en esa época se usaba con mucha frecuencia, sobre todo en flautas, zafonas y demás instrumentos que ya venían con esa afinación. Y tranquilos, que no se caerán las murallas de Jericó, pero al menos suena un poco mas dulce. 






     Hoy. 20 de enero del 2021, he vuelto a grabar la maqueta con una variación. He modificado la nota del hombro de Jesús sustituyéndola con una negra aumentada, ya que, es la única nota alta que no es una mano, pero tiene el mismo color, aunque se trate del cabello dando la sensación de continuidad.

     Por otro lado, creo que Leonardo Da Vinci, se podría haber dedicado perfectamente a la música. Prefirió por otras razones obvias destacar en la pintura. Quizá, supuso que sería un medio de que su obra trascendiese a nuestros días. Todo un genio. Hasta tal punto, que supo guardar la melodía más hermosa jamás oída en uno de sus cuadros más famosos.







En el ADN se encuentran todas las claves que necesitemos para evolucionar.

 

     En este final del 2020 habría que hacer un balance de todo lo acontecido. Y haríamos bien -si cabe-, en quedarnos con lo bueno. Yo me quedaría con la oleada masiva de naves extraplanetarias que han surcado nuestros cielos. Yo mismo he sido testigo de la aparición de dichas luminarias nocturnas que, en sus desplazamientos, transitaban ante mi atenta mirada de forma tan errática como incomprensible. Como todo en la vida, sólo se puede entender aquello que no tiene explicación, desde el punto de vista ocultista, en una especie de acercamiento sensible e incluso intuitivo para poder conectar con lo desconocido. Pero si tenemos temor, ya os digo, que el temor es el peor enemigo que tiene el ser humano. Y haríais bien en intentar corregir ese defecto sicológico porque el temor, es la causa de que haya competencia y no colaboración, de que haya odio y no amor, de que haya guerra y no paz.

     El ser humano cabalga en su andadura a ciegas, batiéndose a mitad de camino, entre lo animal y lo divino. Sin saber cómo ha llegado allí. Nuestros hermanos Mayores intentan conectar con nosotros para mostrarnos que otra realidad es posible. Que es hora de romper el huevo en el que nos hallamos y salir fuera de él para comenzar a crear otra realidad. Lógicamente sólo podrán hacerlo con aquellos que se hayan preparado o estén más preparados a un nivel cuántico. Ellos pueden leer nuestro ADN como nosotros podemos leer un artículo.

     Cuando en 2008 conectaron conmigo, después de diez años de preparación, -con y sin ellos-. Y tras una serie de experiencias, lo primero que me comunicaron es que ya estaba preparado. Porque siempre es así. No es cuestión de suerte, ni de casualidad. Es una cuestión de merecimiento personal al trabajo realizado. En este caso al trabajo interior. Quien sabe cuidar lo pequeño también sabrá cuidar lo grande. Si quieres que nuestros hermanos mayores conecten contigo, empieza tú conectando con la profundidad de tu ser. Aprende a ser humilde y cuando te sientes mil y una vez sobre las prendas que utilizas en la meditación y te hayas unificado en lo sagrado de tu divinidad, comprendiendo la fuerza que nos une a todos como una fuerza que todo lo trasciende, lo mantiene y lo complementa; empezarás a iluminar cada átomo de tu cuerpo y así, y sólo así, se te otorgará el poder de la transmutación.

     Son palabras duras pero no me dejáis otra opción. Estáis acostumbrados -la gran mayoría-, a tomarlo todo a cachondeo. Y esto tiene que acabar o acabaréis pagándolo caro. Se nos dijo que habría que leer la saga por orden, sin embargo cogéis de aquí y de allá sin respetar aquello que os podría beneficiar. 

     Cuando comencé la canalización de los cuentos del sistema local Hulupa D´hära, nuestros hermanos mayores leyeron de mi ADN la información perdida de los registros akhasikos. Ya que, entre ellos, y dado los millones de años de evolución que transcurrió desde la formación del planeta tierra a nuestros días, la información de nuestro pasado se perdió y no sabían lo que nos pasaba ni el motivo de nuestro estancamiento evolutivo. Y juntos descubrimos estas seis historias, y que Ellos, ya lo llamaban Hulupa D´hära que significa en idioma galáctico antiguo: la flecha afilada y dirigida a nuestros orígenes. Como un intento a la desesperada de mostrar una alternativa al impedimento evolutivo en el que nos hallamos. Por otro lado, descubrí, a través de EL SER UNO, que estas historias -nuestros hermanos Mayores intraterinos-, conocían dicha información, y que ya se esperaba que justamente por esas fechas salieran a la luz por parte de algún servicial canalizador o canalizadora. Ellos lo recordaban como los arcanos de Thoth. Y justamente coincide con los primeros arcanos del Tarot, que es lo que ha quedado en nuestros días de la sabiduría Thoth o Tot:

  1.  El Mago.
  2.  La Papisa
  3.  La Emperatriz.
  4.  El Emperador.
  5.  El Príncipe o Hirofante.
  6.  Los Amantes.
      ¿También es esto casualidad? ¿o suerte?. No amigos. Esto demuestra la eficacia del ADN y su relación con la vida. No quiero hacer muy extenso este artículo. Sabed, que por medio del ADN conectamos con el pasado -los akhasikos-, se puede modificar el presente y contiene lo que seremos. Ya que, como se ha dicho muchas veces, nosotros somos una versión mejorada de nuestros hermanos pleyadianos, ya que, fueron ellos los que nos crearon con su propia esencia.