Continuando con los círculos de esta última temporada 2012, tengo que hacer mención al ego. Si existe algún enemigo que no podamos vencer, busquemos primero en nuestro interior. El ego, es lo que hace que creamos que vamos por el camino correcto cuando quizás no sea así. Hoy en día, existen muchas técnicas, terapias y talleres que nos dicen que podemos trascender nuestros miedos, y venciendo ese mal que está en nuestro ser, podremos ser esa persona que siempre quisimos y nunca alcanzamos. Lamentablemente, y más en tiempos de crisis, la gente está dispuesta a depositar sustanciales sumas de dinero por alcanzar dichos objetivos.
Lamentablemente, vemos que los medios publicitarios nos muestran el camino fácil, para que sin hacer ningún esfuerzo, podamos solucionar nuestros problemas sembrándonos una vida exitosa.
El dibujo aparecido en Winchester el 9 de Agosto del presente año, nos muestra el "circulo no pasarás". El Ser divino que mora en nuestro interior. Es cierto que las técnicas de meditación y activación de la glándula pineal, hacen posible que la meditación sea un hecho. Pero de ahí, a que podamos sanar, trasmutar y convertirnos en magos blancos y seres de Luz, hay un paso bien, bien grande...
Mientras desconozcamos nuestro legado: nuestro pasado extraplanetario, seguiremos sin conocernos. No podemos tener un futuro glorioso mientras no reconozcamos que nuestro peor enemigo mora en nuestro interior. No olvidemos que en nuestra mente se guardan todos las experiencias, todas los traumas pasados y todas nuestros anhelos y buenas intenciones. Pero mientras no reconozcamos que tenemos un sistema psíquico de última generación, capaz de transmutar, guiar, sanar, pensar, sentir, gozar y un sin fin de idiosincrasias más, no seremos capaces de iniciar el sendero o camino de en medio. Mientras ignoremos nuestro pasado, jamás podremos ver el futuro con esperanza y con la luz necesaria para hacer aportar nuestra pequeña chispa divina a la Nueva Era.
Un amigo conferenciante, usaba, a veces, una frase que engloba todo esto: Por mucho que el mono se vista de seda; mono se queda. Es decir, que por muchas técnicas que aprendamos, muy preparados estemos para la lucha diaria, por muy bien que nos conozcamos, si no somos capaces de utilizar el intelecto en aprender de nuestro pasado, en conocernos, en entender como hemos llegado aquí, que somos, y qué hacer para sanar el lastre que nos mantiene unidos a la maya, al espejismo y glamour de nuestros días; no podremos estar preparados para afrontar lo que realmente somos.
Muchos contactados hemos hablado de la importancia de nuestro legado, de reconocer nuestra historia. Pero claro, cuesta ponerse a leer. Cuesta incluso hasta creer en los contactados. Y mientras no seamos capaces de reconocer nuestro verdadero ser; estaremos dando vueltas a nuestro ego. No hay prisa, tranquilos. Pero nunca es tarde para empezar.
Si creemos que podemos alcanzar todos los conocimientos, todo lo que nos propongamos, simplemente por meditar y tener fe en ello, sintiéndolo mucho, pero creo que no es por ahí, que nos llegan las cosas. Si así fuese, muchas trampas, dejarían de serlo, muchos objetivos ya estarían salvos. Nos desplazaríamos en astral u holograma fuera del planeta. Y eso no es así. Pero eso no quiere decir que en un futuro lo sea.
Tampoco deberíamos creernos todo lo que nos llega. Por ejemplo. Estoy convencido de que la humanidad no fue creada por los Anunaki, como al día de hoy se nos presenta. Valoro el trabajo del investigador Zecharia Sicthin, al descifrar las tablillas sumerias. Pero eso es sólo una parte de la historia, y encaja con otras teorías anteriores. Ya hice mención sobre ello el año pasado, aproximadamente por estas fechas:
http://flechaafilada.blogspot.com.es/2011/08/la-verdadera-historia-de-los-annunaki-y.html
Pero si no hay un trabajo previo de preparación, de estudio y de dedicación, el futuro no podrá ser mejor de lo que ya es. Animaros, pues el esfuerzo bien merece la pena.
El verdadero servicio que se realiza en la meditación, es aquél en el que no esperamos ser nada ni recibir ningún don, sino que simplemente, se trasciende la luz en nuestro interior.
Por la acción misma del pensamiento, la energía debe fluir. El discípulo deberá quedar en un plano impersonal. como un mediador, un guerrero, un Ser capaz de crear un puente con lo divino.
Foto círculo de cosechas: http://temporarytemples.co.uk
Foto chakras: Google.
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