1. El Guerrero de la Luz, ama, siente e integra a Dios por encima de todas las cosas, tangibles e intangibles. Todo viene de Dios. Todo retornará a Dios.
2. De igual manera, el Guerrero de la Luz ve en la creación a Dios mismo en cada ser manifestado, en su esencia y en su divinidad manifestada.
3. El Guerrero de la Luz, siente e integra cada parte de la creación divina, cuidando de ella como Dios mismo lo haría, como si de Su Divina representación se tratase.
4. Al integrar, el Guerrero de la Luz elige el camino, así como su divina acción, sabiendo, que ese camino integrado, es el camino que su alma ha elegido para crecer y desarrollarse, a la vez que crea nuevas formas de pensamiento llevadas a la acción, dentro de la creación misma.
5. Un Guerrero de la Luz, integrado, auténtico y genuino, al ver la verdad detrás de todo lo manifestado, no se dejará llevar por el fruto de sus acciones.
La abundancia es el atributo de lo divino como algo análogo al ser. El reto consistirá en trascender el sufrimiento, así como el gozo por medio de los sentidos.
6. El Guerrero de la Luz entiende que la lucha se cierne en su interior. Igualmente entiende que la filosofía es un medio, es el camino integrado en su Ser, que le servirá para trascender al Yo. Pero sabrá que es sólo un medio y por lo tanto, entenderá que no valdrá la pena batirse en la lucha o entrar en conflicto externo por ello.
7. Meditar significa ofrecer, así como agradecer. El Guerrero de la Luz sabe, que ello conlleva cinco pasos: relajación, concentración, contemplación, meditación e iluminación.
8. El Guerrero de la Luz sabe que con el tiempo puesto en la práctica meditativa, centrando su atención en el entrecejo, su ojo interior, despertará, con el tiempo, al ojo de la visión.
9. Entenderá al Universo como un Todo y a Él mismo, como parte de ese Todo.
En su interior y siguiendo las percepciones de su intuición, llegará a vibrar con su Luz, en su autenticidad interna.
Así se integrará las Leyes Universales en su propio Ser: Lo que es arriba es abajo. Lo que es adentro lo es afuera.
Toda acción conlleva una reacción.
10. Entonces, sabrá vibrar con el color correspondiente dentro de la gama de los colores del arco iris, como un camaleón lo haría adaptándose a las circunstancias.
El Guerrero de la Luz se hace, no se nace.
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