11/02/99
El cumplimiento de las normas de hospitalidad, participación y obligaciones internas, os lleva indiscutiblemente a percibir un cambio en vuestras vidas y en el entorno social. Apartar pues, de vuestras vidas, todo aquello que dificulta tal desenvolvimiento espiritual. En ocasiones, nos encontramos que el camino tiene grava, no es fácil caminar por él, pero si contáis con vuestra paz interior el camino es más llevadero.
Quisiera que todos los males que os acosan en la vida, desaparecieran firmemente de vuestra existencia. Pero esto, es muy difícil de realizar, porque, no podemos interferir en vuestra libertad. Y es de vuestra responsabilidad, comprender de manera activa que nada puede cambiarse por las buenas, sino que, todo cuesta mucho de realizar. Cualquier cosa que os estorbe -o dicho con otros términos-, perturbe la manifestación de la Luz; aunque fuera justo que desapareciera, es muy difícil influir a todas las personas para que el bien común se cumpla.
La Tierra, es el lugar donde habéis venido a la manifestación. Esto implica un condicionamiento en vuestras estructuras internas y etéricas, en la forma en que actuáis y percibís la realidad, en el tiempo y en el espacio. Vuestra mente se acondiciona a las influencias del planeta, tanto físicas, como energéticas, bien sean curativas o dañinas. A la Confederación Intergaláctica, les ha llevado miles de años de esfuerzo y sacrificio, para que vosotros, estéis bien como raza, e incluso lleguéis a entrar como miembros de la Gran Hermandad, dentro de la Fraternidad Universal. Se os ha ayudado de miles de formas diferentes. Se os sigue ayudando sin interferir en vuestra libertad.
Vosotros habéis elegido vuestro destino en el planeta Tierra, antes de que vinierais a la manifestación física. Es mucho el trabajo que queda por realizar, aunque la finalidad, como ya sabéis, es el desenvolvimiento de la integridad y alcanzar en buen grado la armonía cósmica entre la mayoría de seres que pueblan el planeta.
En ocasiones, la realidad parece que se os escapa de las manos, ya que, no existe ningún valor verdadero entre las personas y os sentís desolados, faltos de rectitud cordial. Carecéis de justicia verdadera. Buscáis comprensión y encontráis discordia.
Esto no es armonía, es el resultado del potencial inmune de los poderosos en vuestro planeta. Éstos os ven venir, saben bien lo que queréis, os hacen fastidiar, os controlan y os hacen estar a sus expensas, para lo que ellos quieran. En consecuencia, os quitan la obligación de evolucionar porque no os dejan ninguna puerta abierta, para que vosotros, podáis experimentar y obtener nuevas experiencias.
Nadie se merece que se trate así a su hermano. Estoy francamente hablando en nombre de todas aquellas personas que se les priva de su libertad para evolucionar, a cambio de que otras estén mejor y vivan de forma cómoda. Y lo peor de todo, es que, no les importa ni lo más mínimo como se sienten sus hermanos, que necesitan, o con que bienes pueden responder.
Este mundo, se os queda pequeño, porque sois demasiados los que lo pueblan. Este mundo, está preparado para ochocientas cincuenta millones menos de seres de lo que ahora sois. No os desesperéis por ello. Todos tenéis los mismos derechos y las mismas obligaciones. Realmente, trabajando todos, hay bienes de sobra para que se repartan bien por todo el planeta. Esto implica un aprovechamiento inteligente de los bienes naturales, y una dispersión justa de las mismas. Todo lo que no sea ésto, irá en contra de vuestro planeta, y de vuestra raza; la humana, porque no hay otra. Hace falta que todos los hombres amen constantemente durante cientos de años, para mantener un cierto equilibrio en vuestro planeta. Desconocéis el verdadero amor en toda la raza. Desconocéis la verdadera libertad en su pura manifestación. Desconocéis la fuerza omnivalente de vuestro interior. Desconocéis el verdadero progreso.
Sin directrices en vuestras vidas y en vuestras comunidades, sin metas, sin objetivos comunes donde todos sean los beneficiados. Sin las mínimas aspiraciones espirituales; estáis perdidos en la galaxia.
Por lo menos, aquellos que quieran dar los pasos necesarios para una buena armonización, sepan y conozcan la realidad que les confunde cada día, y despejen de sus vidas, aquello que les estorbe. Es lo fundamental, que éstas personas sean ayudadas por sus Hermanos de la Galaxia.
Amor
ANDARK
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