Todo lo que nos llega es para dar.

  Con ésta analogía llegamos al punto culminante donde toca explicar algo, por el cual somos, vivimos y nos movemos, en definitiva; existimos. Y es que, todo responde a un Plan. El carbón, deberá convertirse en diamante, y todo ello, bajo un proceso lento, natural y sincronizado, pues nada escapa a la Ley. Estamos a punto de dar un salto cuántico evolutivo, y como proceso previo al 2012, debemos estar preparados. Y es por ello, que hay que volver atrás a la historia.

  Hace 12.400 años aproximadamente, y durante la culminación de la época atlante, nuestros Hermanos Mayores abandonaron definitivamente a la humanidad. Algunos de ellos ya se habían mezclado con la humanidad misma, creando nuevos patrones, nuevas mutaciones. Pero el caso es que nos abandonaron. Y lo hicieron sistemáticamente, todo ello respondiendo a un trazado y concienzudo Plan Cósmico. No sin antes haber culminado en un enfrentamiento entre las fuerzas de la luz y de la oscuridad, todo ello, fue el desencadenante de una serie de cataclismos en la Tierra que produjeron inundaciones y catástrofes, lluvias meteóricas e incluso accidentes planetarios, como el choque de grandes asteroides sobre los océanos del planeta. El caso es que, sinceramente, nos abandonaron, creyeron que el hombre se estaba volviendo demasiado arraigado a sus costumbres, se estaba  -etimológicamente hablando-, acostumbrando mal, mezclándose demasiado con la materia y dejándose ser manipulados por otras entidades llamemosles oscuras, perdiéndose para siempre el conocimiento arcano que nos ayude a comprender el desarrollo trascendental, necesario para producir con ello la mutación necesaria, que nos haga dar el tono adecuado para vibrar con los tiempos, teniendo la transparencia necesaria para que haya evolución.
   Vinieron profetas y maestros, y no fueron del todo bien entendidos. Vino krishna, budha, Jesús, y muchos otros. Todos ellos, dieron su mensaje, aunque insisto -no del todo bien interpretado por la gran mayoría-. Claro que -según nuestros Hermanos Mayores-, estamos viviendo miles de años en trance, cegados aún, por el materialismo y sus vertientes motivadas por unas corrientes cósmicas negativas, denominadas: bajo astral, ilusión, maya, espejismo o glamour, todo ello se refiere a lo mismo. Fuimos manipulados durante miles de años por entidades negativas, que no creyeron en la humanidad, que no nos ven como candidatos dignos para culminar la evolución y entrar en las percepciones de la cuarta dimensión o mundos paralelos -que es como comúnmente se les conoce a estos planos sutiles-. Por todo ello, hay lucha ahí mismo; en los planos sutiles. Nuestro mayor mal, la causante de todo nuestros males, es según Maitreya: la falta de amor en nuestras vidas. Ello provoca la separatividad, al igual que el resto de los estados causantes del hambre y la disgregación que sufren dos tercios de la población humana.
   No esperemos que vengan a sacarnos de nuestras penosas condiciones sociales, basadas en unas normas, hechas y confeccionadas por el hombre mismo. Eso nunca puede ser así, y debe ser, el mismo hombre el que dé las condiciones necesarias para que nuestros hermanos y hermanas puedan vivir de una forna digna y merecida como hijos de un verdadero y único Dios, por derecho mismo de nacimiento. Y es que, en realidad, creo que debemos comenzar por perdonarles a ellos, como los Maestros nos han perdonado a nosotros.

  Lo que contaré a continuación, es algo que ocurrió como experiencia personal, para ello, he dado título al cual, he denominado en éste artículo: Todo lo que nos llega es para dar. Así es y así debe ser. Ahora iré a la historia de mi propia vida experiencial.

  Corrían los años 92, creo recordar. Yo ya estaba metido en el mundo de la autorrealización personal. Algunas de mis amistades, también lo estaban, como era el caso de Laura. Ella, vino un día diciéndome que había encontrado algo muy importante. Ni más ni menos que una serie de documentos reveladores, venidos de un supuesto extraterrestre. La idea me entusiasmó, a la vez que me puso en guardia. Tendría que juzgarlo por mi mismo -me decía-. El documento llegó a mis manos. Recuerdo que Laura estaba encantada, pues lo había probado, y daba resultado lo que allí se exponía. A continuación, me invitó a divulgarlo entre aquellos que se sintieran preparados. Algunos lo vieron bien, otros en cambio; lo rechazaron casi de inmediato. Cada cual debe juzgar por si mismo. Incluso he de admitir que yo mismo, en un principio lo admití. Luego, tal vez, cegado por aquellos que lo habían rechazado, hizo que yo también empezase a verlo con no muy buenos ojos. Ahora bien, y es que, estoy convencido que la verdad absoluta no existe, sino que, todo esta formado por verdades a medias o que: la realidad misma, está forma por medias verdades.
  El documento se perdió, pero a continuación, expondré lo más sustancioso, aquello que recuerdo que he practicado y que creo como verdadero. Así pues, Brisa marina, comenzaba con un documento titulado: DIS DAS DOS.


pd. Luego fue hallado y expuesto en este mismo blog etiquetado como: Brisa Marina.